Otro agosto fatídico. Hace dos años, Antonio; hoy el españolista Dani Jarque. Nos unimos al dolor del R.C.D. Español de Barcelona. Muchos recuerdos se agolpan de repente. Descanse en paz.

Y no nos referimos, que también, a la espectacular presentación de Didier Zokora como nuevo jugador sevillista que ha tenido lugar hoy en la Plaza de la Virgen de los Reyes a los pies de "la Giralda de nuestra ciudad... ".

"Grandilocuente" es el adjetivo que ha empleado el reporterillo de Punto Radio para calificar la puesta en escena, rompiendo una vez más todos los moldes, que el Sevilla F.C. ha protagonizado hoy en pleno corazón de Sevilla. En fin... pobretico.

El "sombrerazo" se lo lleva hoy , por encima de todo y de todos, nuestro presidente José María del Nido que, a preguntas de un atribulado locutor "¿Teme que a medio o largo plazo el caso Marbella afecte a la estabilidad del club?", obtuvo la siguiente respuesta: "Espero que sea la última vez que tenga que contestar a esto: soy inocente a todos los efectos como cualquier persona que se presente a un juicio oral. Eso afecta a mi vida privada y a mi vida profesional, no afecta a mi vida como presidente del Sevilla FC; por lo cual, ruego que cuando alguien quiera hablar de ese tema pida una entrevista con mi despacho profesional, que seguro que se la daré, pero no en actos del Sevilla FC, en los que no me volveré a referir a ello".

Tan fácil y tan difícil como eso. Esto es el Sevilla F.C. y nuestro presidente bien que lo sabe. Un asunto que le afecta en lo particular y en lo profesional, en el que sólo podemos desearle lo mejor,  no se vinculará nunca con el club al que representa. He ahí la gran diferencia. ¡Lo que hace tener las cosas bien claritas desde el principio! Aquí, seriedad por encima de todo, sin mezclar churras con merinas. Del Nido sólo ha manifestado hoy lo evidente, pero resulta tan difícil en ocasiones expresar lo obvio... y para muestras mil botones de personajes del mundo del fútbol que han confundido -y lo continúan haciendo- lo privado con lo ajeno, lo particular con lo social, sus cuitas personales con el respaldo unánime de los seguidores de su club... ¿hay que ir muy lejos para comprobarlo?

Para colmo, dejó una "perlita" de esas a la que tan acostumbrado nos tiene: "A día de hoy, a las 12:15, en este marco incomparable, creo que el Milán no tiene dinero para firmar a Luis Fabiano, esa es mi opinión. No sé qué pasará mañana o esta tarde. Respeto la opinión de cada uno pero el único que tiene los derechos federativos de Luis Fabiano es el Sevilla, no me meto en lo que tiene que cobrar en el club al que posiblemente se iría, y me gustaría que nadie se metiera en lo que el Sevilla tendría que cobrar porque es una decisión que tomaremos nosotros".

Post.- La prensa italiana se ha hecho eco de las palabras de Del Nido. Así Il Corriere dello Sport titula: «L'offerta fatta dal Milan per Fabiano è irrisoria».Il patron del Siviglia: «Quanto mi offrono i rossoneri va bene per uno della squadra B» y en La Gazzeta dello Sport puede leerse: Luis Fabiano lontano dal Milan. Il presidente Del Nido ritiene ridicola la proposta rossonera (14 milioni) e la respinge.

Plagiando al historiador César Vidal… Corría el año 110 después de Cristo cuando se publicaron en Roma las sátiras de Juvenal. En ellas, el habilísimo poeta latino diseccionaba la sociedad romana con una agudeza y un sentido del humor verdaderamente prodigiosos. Precisamente, en su sátira X, donde Juvenal comenta la manera en que los seres humanos, por su propia naturaleza, tienden a confundir el bien con el mal, realizaba la siguiente descripción del pueblo de Roma: “qui dabat olim imperium, fasces, legiones, omnia, nunc se continet atque duas tantum res anxius optat, panem et circenses” lo que podría traducirse de la siguiente manera: “el pueblo del que en otra época dependían el gobierno, la justicia, las fuerzas armadas, todo, ahora se desentiende y sólo desea con ansia dos cosas: pan y circo”.

La X sátira de Juvenal criticaba con dureza al pueblo romano que hasta entonces, merced a la Democracia,  había sido dueño de su destino y se había sentido orgulloso de sus instituciones. Llegado el momento del régimen despótico empezó a conformarse con bienes miserables: pan y regocijo.

Sin ánimo de ser exhaustivos, los hechos son los siguientes:

1. A falta de seis jornadas para la finalización del campeonato liguero, los residentes en la antigua Hispania, narcotizados por decenas de canales de telebasura, centran toda su atención en los estadios futbolísticos.

2. Así, los sevillistas (al igual que los recreativistas) estamos pendientes de gentuza como González Vázquez o de Pérez Burrull, sin olvidarnos del más grande traidor de la historia de nuestro club.

3. Los seguidores del club menor de la ciudad permanecen atentos a los resultados de sus rivales en múltiples encuentros que le pueden llevar una vez más a la segunda división.

4. Los aficionados al equipo del gobierno y de todos los regímenes, anestesiados y con el Marca entre las manos, continúan a la espera de que a Pepe, el matón de discotecas, se le reduzca a la mínima expresión por los Comités superiores la ya de por sí escasa sanción por los tremendos y diversos vapuleos que obsequió el pasado miércoles a Casquero y a Albín, entre otros. Mientras, los seguidores del Barcelona sueñan con un triplete cada vez más posible.

5. Y así sucesivamente, a la inmensa mayoría de ciudadanos de este país, convertidos en seguidores de este circo mediático, le importa un pito los enormes problemas en los que España en general y Andalucía en particular se sume jornada tras jornada.

6. Semejante imbecilidad se produce cuando el Presidente del Gobierno acaba de llevar a cabo una crisis ministerial con el fin de atajar, mediante esperpénticas sesiones fotográficas y grandilocuente propaganda, la crisis económica que negó hasta ayer mismo. Para colmo, Zapatero se autoproclama Ministro de Deportes con el decidido afán de descubrirnos el horizonte del próximo Mundial y de ocultarnos la triste realidad del presente y del inmediato futuro.

7. Semejante mentecatez se produce cuando el presidente electo de la Junta de Andalucía lleva a cabo la “espantá” más sonada de nuestra democracia, un año después de comprometerse -¿tercera modernización?- con el futuro del pueblo andaluz, prometiendo el “pleno empleo" al igual que su jefe.

8. Semejante estulticia se produce cuando la destrucción de puestos de trabajo en los últimos tres meses ha afectado a 800.000 personas, superando con creces la cifra nunca alcanzada de los cuatro millones de parados, a una media de 9.000 nuevos desempleados al día o lo que es lo mismo 2.200.000 nuevos parados en tan sólo dos años.

9. Semejante simpleza se produce mientras los impasibles sindicatos y las organizaciones empresariales -convertidos en paniaguados del Gobierno gracias a las millonarias subvenciones en la que se rebozan- no acometen las necesarias reformas que requiere la tremenda situación de emergencia nacional que padecemos.

10. Semejante dislate se produce cuando otra "profesional" de la política, Rosa Aguilar, deja tirados a los ciudadanos cordobeses y a sus compañeros de coalición en busca de su supervivencia personal.

11. Semejante sandez se produce mientras el Alcalde de Sevilla se enroca, en vergonzoso complot con el de la pipa, en el Salón Colón, silbando y mirando para otro lado, mientras constata que los escándalos de Mercasevilla, de las subvenciones a las dictaduras sudamericanas, de los viajes al Caribe y de las facturas falsas no le afectan.

12. Semejante estupidez se produce cuando se han cumplido tres meses de la desaparición de nuestra recordada Marta del Castillo sin que las autoridades tengan la más remota idea de lo que fueron capaces de hacer dos adolescentes con su cuerpo.

13. Semejante insensatez se produce cuando la policía sevillana sigue sin aclarar qué ha sido de los más de cien kilos de cocaína desaparecidos en su sede oficial de la capital de Andalucía.

Hoy, 1.900 años después, sigue vigente y de plena actualidad la X sátira de Juvenal: “el pueblo del que en otra época dependían el gobierno, la justicia, las fuerzas armadas, todo, ahora se desentiende y sólo desea con ansia dos cosas: pan y circo”.

¡Qué país, qué paisaje, qué paisanaje… !, Unamuno dixit. Atentos, pues, al fútbol, a nuestro Sevilla, al partido de mañana, a lo que supone vencer al equipo más protegido de este país, pero sin olvidar -y tratando de remediarla entre todos- la situación de emergencia nacional que nos acecha.

Contrariamente a lo que dice todo el mundo -que hay que esperar a que termine la temporada; que la opinión de la afición, de la entendida y protestona se entiende, ha de ser tenida en cuenta y que culminar la temporada en puesto de Liga de Campeones no es aval suficiente para la continuidad del técnico- Jiménez ha atesorado ya a estas alturas méritos suficientes para estar un año más al frente de la primera plantilla sevillita.

Manolo Jiménez intervino hace un par de días en un programa de Canal Sur Radio -también hay que tener ganas de asistir a semejante lugar- y pronunció una frase que, sacada absolutamente de contexto, ha hecho correr ríos de tinta y horas de emisiones radiofónicas: "Yo también tengo que decidir si me interesa o no seguir. Me quedaría si se conforma un equipo para intentar de verdad ser campeón de Liga. Soy joven pero ambicioso. Benítez con los números que yo llevo dejó al Valencia y siguió entrenando en otro sitio. El Sevilla es mi casa y ojalá me aburra aquí, pero tengo unos representantes y confío en ellos". Lo que no ha aparecido en un solo noticiero es que el técnico aseguró en la misma entrevista que su deseo es permanecer en el club y que su "prioridad primera es el Sevilla, la segunda el Sevilla y la tercera el Sevilla". Está claro que el técnico debe tener algo que decir en su futuro y ha dejado muy claro que no va a ser una figura decorativa en la futura negociación.

Está claro que sus detractores, sus envidiosos e impertinentes maldicientes, no van a bajarse del burro. Jiménez es la víctima propiciatoria, la parte más débil (como en todos los clubes) del organigrama deportivo y se les ha escapado vivito y coleando a estos carroñeros cuando ya creían tener su tobillo entre las garras. Han apostado toda la temporada por su inmediata marcha, lo han pretendido hundir en la miseria más absoluta, lo han vilipendiado y desprestigiado hasta la náusea, han hecho lo posible y hasta lo imposible por escarnecerlo y denigrarlo hasta la más absoluta de las miserias. Mientras, él se ha limitado a trabajar haciendo un equipo nuevo tras la marcha de jugadores como Alves, Poulsen y Keita (casi nada al aparato), a pelear cada punto y cada eliminatoria y al final ha habido de todo: debacle en la UEFA (seis puntos en la fase de grupos y a la calle), semifinales en Copa (infame partido en San Mamés) y, de momento, tercer puesto en Liga, tras los dos más grandes portaaviones del fútbol europeo que nos cuadruplican el presupuesto; mostrando la placa trasera de la matrícula, a 6 puntos de distancia, a corbetas como el Villarreal y, a 11 puntos de distancia, a acorazados como Atlético o Valencia.

El objetivo es quedar entre los cuatro primeros y, aunque la meta no está conseguida, la trayectoria al día de hoy invita al optimismo:

	JUANDE RAMOS JIMÉNEZ TEMPORADA PUNTOS CONSEGUIDOS PUNTOS POSIBLES % PUNTOS CONSEGUIDOS PUNTOS POSIBLES % 2005/2006 68 114 59,65 0 0 0,00 2006/2007 71 114 62,28 0 0 0,00 2007/2008 8 21 38,10 56 93 60,22 2008/2009 0 0 0,00 54 84 64,29 TOTAL 147 249 59,04 110 177 62,15

Pero es más, y pidiendo perdón de antemano, ¿se puede decir esto?: si la meta no se consiguiera finalmente, Manolo Jiménez debería continuar siendo el máximo responsable de la primera plantilla sevillista.  Se lo ha ganado a pulso y ofertas no le faltarán para cambiar de aires, ¿o es que creen ustedes que en el resto del mundo futbolístico está pasando desapercibido el quehacer del técnico sevillista? Con la frialdad de los incuestionables datos, con el análisis de sus resultados por una prensa seria no emponzoñada -que la hay- y por las secretarías técnicas de otros clubes decentes -que también los hay-, Jiménez se ha convertido en un objetivo deportivo de primera magnitud.

De salvadores multimillonarios y de rapsodas de "diagonales profundas" y de "veinte metros más p'alante" está lleno el mundo del fútbol y los clubes repletos de agujeros en sus tesorerías por considerar tales pantomimas y algunas que otras comisiones.

Sigue una parte importante del sevillismo en estado permanente de cabreo y empeñada en reescribir la historia, escudriñando sin éxito por todos los rincones de sus 103 años largos de historia momentos de grandeza similares a los actuales.

Unos cuantos iluminados periodistas -"sevillistas", así se autoproclaman- caracterizados por un odio atroz a Del Nido, se han conjurado para derribar el proyecto futbolístico más importante y cimentado del deporte español. Se aprovechan, para ello, de una profana masa social reflejo de la sociedad actual y de la andaluza y sevillana en particular a la que lanzan, un día sí y otro también, ideas y proclamas diseñadas en un mismo laboratorio, el de la fobia, la inquina, la animadversión, los espumarajos y la bilis que "adornan" sus comisuras labiales.

La mejor trayectoria liguera de la historia sevillista no es que esté siendo atrozmente cuestionada sino simplemente bombardeada en toda su línea de flotación. Al parecer el Sevilla, tercero en la liga española, tras F.C. Barcelona y Real Madrid, está obligado a superar a estos dos trasatlánticos del fútbol mundial. Otros clubes con mayor presupuesto que el Sevilla ven desde lejos la matrícula trasera del club de Nervión. Sin embargo las sensaciones son otras y la irritación y el malhumor se hacen perennes en una parte importante de la afición porque, decimos, unos cuantos se han encargado, desde su indignidad, de utilizar los altavoces y las páginas de sus medios con fines propagandísticos, desvirtuando la realidad de las cosas y corrompiendo conciencias ajenas en pos de sus metas.

Después de lo que han escrito y hablado de Mosquera y de Jiménez durante toda la temporada, y conscientes de que su discurso puede volver a malograrse, ahora comienzan su particular marcha atrás: "Hay que reconocer que ha mejorado", "así sí, Jiménez", "se merece la renovación", "sería una injusticia que no siguiera el próximo año"... La pretensión no es otra que, abjurando de su plática inicial, continuar su campaña de propaganda para, teniendo permanentemente enojada e irritada a la gente, apuntar con pulso más firme la mira de su kaláshnikov hacia el palco nervionense.

La última campaña -la continuidad o no del técnico de la primera plantilla- se ha puesto recientemente en marcha y no se cortan un pelo para destapar su bajeza: "la decisión es del consejo de administración, pero ¡ojito! que gran parte de la grada no está con él y puede volverse contra el palco si lo renueva".

Es decir, reconocen los méritos logrados por el técnico en su trayectoria, admiten la competencia del consejo para decidir, declaran la idoneidad de los detractores para disentir pero ignoran a la otra gran parte de la afición que valora el trabajo de Jiménez y se vanagloria de su quehacer.

¿Por qué motivo dan por hecho que esa parte de la afición, más paciente y callada sin duda, permanecerá en silencio el año próximo si, injustamente, no se le renueva al técnico? ¿O es que esa gente no tiene derecho al pataleo?

Hay que ser osado, hay que ser atrevido. De la rueda de prensa de José María del Nido antes de partir a tierras vascas sobresale un único titular: “Vamos a Bilbao a comernos al león”.

"Todas las sensaciones que tengo son positivas. Si nuestro Sevilla está a su nivel no existe ninguna duda de que de que vamos a pasar, sufriendo, respetando al rival, respetando a los bilbainos, a los vizcaínos y a los vascos, respetando a Llorente... Vamos a Bilbao a comernos al león. Que no haya duda del respeto hacia el Athletic  y hacia sus jugadores, pero no hay un vasco que duerma sabiendo que juega Kanouté. A mí que juegue Llorente me da exactamente igual y vuelvo a repetir nos vamos a comer al león, que no quede duda, nos vamos a comer al león desde la melena hasta la cola. Estamos a un pasito y medio de la gloria y ese paso y medio que nos queda lo queremos dar, va a ser en un ambiente difícil y caldeado, pero el Sevilla FC de los últimos años está acostumbrado a disputar no sólo semifinales, sino finales, y a ganarlas. Y así vamos a ir. La plantilla sabe lo que tiene que hacer y desde el mismo autobús de Bilbao al aeropuerto el sábado ya estuvimos preparando el partido. Hoy veréis la cara de los jugadores, tienen la misma que el presidente y están con la misma voracidad con las que les estoy hablando a ustedes. Ellos son conscientes de que el título está un pasito y medio para ganarla y vamos a pegar ese medio paso ahora, estamos ilusionadísimos, deseosos de que llegue el encuentro".

En el programa El Desmarque de ayer en Cope Sevilla valorábamos lo celosa y escrupulosamente que el Sevilla estaba gestionando los días previos al choque copero de Bilbao. Bastante carga emocional tiene de por sí el encuentro para  mostrarse más vehementes aun. Y conociendo a la prensa que nos rodea y que tanto “nos quiere”, todavía más. La cadena televisiva La Sexta ha hecho el agosto durante toda la tarde de hoy y lo que queda hasta mañana a las ocho de la tarde. “La Nuestra” no le ha ido a la zaga.

Desde el ya famoso “Eindhoven, sí o sí” las proclamas del presidente han tenido un éxito casi pleno. Para muchos, estas acciones se valoran con desdén a la espera del inoportuno revés para refregárselo tantas veces cuanto plazca. Sin embargo no parece que estas palabras se pronuncien porque sí y algún fundamento encierran. La presión mañana en San Mamés se dirigirá hacia el palco en detrimento del terreno de juego y el apremio y la premura, indirectamente también, sobre los jugadores del conjunto vasco que, quitando a Aitor Ocio, no se han visto en otra ¿Pero merece la pena tanta exposición? ¡Hay que ser atrevido, hay que estar sobrado de confianza, con las ganas que te tiene tanta gente!